Ève cup- copa menstrual
Creo que, como toda
mujer, pasé por todos los pasos durante la menstruación, que fueron:
1.
Compresas (odiadas a muerte, sorry not sorry).
2.
Tampones (amados como si de ellos dependiese mi vida).
3.
Compresas de nuevo (por qué me molestan los tampones después de
tantos años usándolos mañana y noche?).
4.
Ève cup (por qué no llegaste antes a mi vida??!).
Algo tan
natural como menstruar causa unos 100 mil millones de residuos al año entre compresas y tampones, y
ese debería de ser el primer motivo para pasarse a la copa, pero os voy a dar
alguno más:
⇛Chao chao residuos, empezando por el plástico,
ya que uno de los materiales que tienen nuestros queridos tampones y compresas
es plástico, llamadme ignorante, pero desconocía por completo este dato hasta
hace un par de años, ya que en las etiquetas lo que vende es el 100% cotton.
Plástico en contacto directo con mi vulva? No, gracias. Que también hay marcas
que venden productos totalmente de algodón ojo, eso sí, bastante más caros que
los otros, y yo, o menstruo o vivo, y me hace falta el sueldo para vivir, es
una fea costumbre que tengo.
⇛More money for me, con el paso de los
años no les echamos cuentas, pero menstruar nos supone una cuota durante unos
30 y tantos años. Yo no he hecho el cálculo, de hecho, sigo siendo pobre pero…
Cuánto sitio tengo libre ahora en el armario del baño o la maleta!
⇛Tiempo, lo único que no te puede
devolver nadie, hasta 12h (NUNCA MÁS
TIEMPO) con ella puesta sin tener que estar pensando en cambiarla,
maravilla pura.
Yo en
concreto probé este modelo, ève cup talla S, después de
llevar un tiempo siguiendo por IG la cuenta de Laura Cámara
@lauracamara.ginesex.
En su
tienda on line tiene un test gratuito
donde te ayuda a elegir tu copa en función de tu edad, de si has tenido hijos o no, de la cantidad de sangre que crees tener por período, etc... Te manda el resultado por privado al mail, y
ya eres libre de comprarla en su tienda o en cualquier otro sitio.
La
descripción de ève cup en su página dice así:
"¡Esta copa menstrual me encanta! Me gusta su tacto suave, sus rugosidades y su versatilidad.
Tiene terminación de palo, que puedes recortar si es necesario.
Fabricada en una silicona 100% hipo-alergénica y de alta calidad. Te darás cuenta de su calidad, en cuanto toques su tacto super-suave.”
Ademas incluye un pdf escrito por ella misma para conocer todos los trucos de uso y mantenimiento.
Más puntos también porque tiene una estimación de vida de 10 años!
El tema talla, como comenté antes, en este caso, hay que hacer el test para mayor fiabilidad.
El mantenimiento es bien sencillo, hay que esterilizarlo antes de empezar el ciclo, o bien en un cazo y agua hirviendo, dejándolo 4-5 min, o bien, con un esterilizador al microondas 3 min.
Yo me compré el pack de copa+ esterilizador.
Cada vez que vayamos a cambiarla lavarla con agua y gel íntimo (manos siempre limpias también!) para no alterar el PH de nuestra vagina, y ya está, ese sería su mantenimiento.
Trae también una bolsita donde la dejaremos entre ciclo y ciclo. Hay quien esteriliza la copa al finalizar el ciclo y antes de empezarlo de nuevo, no es necesario, además de desgastar el material antes de tiempo, con una vez es suficiente.
Y para las que os preocupe el tema cándida u hongos en general, el uso de la copa NO VA A PRODUCIR HONGOS NI CÁNDIDA, podéis usarla con total tranquilidad.
Y ahora os voy a relatar como ève y yo nos hemos hecho muy buenas amigas:
1.Primera regla con ève: la usé sólo en casa, por aquello de la primera toma de contacto, miedo a manchar, etc. Desde el primer día parece que la coloqué bien, porque no me manché nada, aunque la notaba y no se debe notar, además quitarla era horroroso.
No se debe tirar del palito para quitarla sino pellizcarla para que deje de hacer vacío, pero que se me ponía la cosa cuesta arriba oye! Aunque no me di por vencida y seguí intentándolo. De hecho yo que llevo unas uñas dignas de Rosalía, por primera vez en 5 años me las corté para así darle una oportunidad real, ya que, al costarme tanto trabajo quitarla me hacía daño con las zarpas, y qué necesidad de sufrir? Pues ninguna.
2. Segunda regla: empecé a llevármela al trabajo, yendo al baño más de lo normal eso sí, pero ningún incidente que lamentar. Pero nada chica, que yo seguía sin poder cogerle el puñetero pellizco bien a la copa y notando el dichoso palito y claro, una que padece de dolor de cintura la pones 10 minutos haciendo el kamasutra en busca de la copa perdida, y se le quitan las ganas de ser ecologista y eficiente.
3. Tercera regla: no os voy a engañar estaba ya por los suelos, hasta que hizo Laura un directo y dijo que se podía cortar el palito de ève sin ningún problema, y así hice. Milagro! Dejé de notarla, casi me echo a llorar no sólo del dolor de cintura que tenía ese mes producido por la ciática, sino por avanzar con, en aquel momento, mi nueva amiga ève.
4. Cuarta regla: me había empeñado en ponerme y quitarme la copa de pie, con una pierna en alto como hacía con los tampones, y este último mes me dio por sentarme en el vidé, y así fue como descubrí cómo quitarla sin tener que rebuscar en mis adentros ni pinzarme el ciático. Porque cuando te levantas la copa se levanta contigo, y al sentarte se baja hasta salirse un poco, o un mucho, eso ya depende, y pillarle ahí el pellizco es de todo menos complicado.
Si me hubiese dado por sentarme antes, no me hubiese hecho falta esos 4 meses, pero los libra no destacamos por nuestra rapidez.
Sólo añadir para terminar que, si hay algún motivo que aun te impida probarla, que no sea que sientes asco de tocarte tus genitales, que estas vaginas que nos han dado son un regalo y no hay que hacer otra cosa con ellas que amarlas y tocarlas, tocarlas mucho!
En definitiva, si tuviese que ponerle alguna contra, sería el período de adaptación, que no todas están dispuestas a darle un margen de tiempo para ver si realmente es para ti o no la copa. Porque también puede pasar que no tengas la suerte de que este modelo de copa concreto sea para ti, de ser así, mínimo otra oportunidad a otro modelo yo sí se lo daría. Todo son puntos a favor, sin dudarlo ni un segundo.
Post no patrocinado.
Podéis comprarla aquí: https://www.ginesex.es/producto/copa-menstrual-eve-cup/
Y ahora os voy a relatar como ève y yo nos hemos hecho muy buenas amigas:
1.Primera regla con ève: la usé sólo en casa, por aquello de la primera toma de contacto, miedo a manchar, etc. Desde el primer día parece que la coloqué bien, porque no me manché nada, aunque la notaba y no se debe notar, además quitarla era horroroso.
No se debe tirar del palito para quitarla sino pellizcarla para que deje de hacer vacío, pero que se me ponía la cosa cuesta arriba oye! Aunque no me di por vencida y seguí intentándolo. De hecho yo que llevo unas uñas dignas de Rosalía, por primera vez en 5 años me las corté para así darle una oportunidad real, ya que, al costarme tanto trabajo quitarla me hacía daño con las zarpas, y qué necesidad de sufrir? Pues ninguna.
2. Segunda regla: empecé a llevármela al trabajo, yendo al baño más de lo normal eso sí, pero ningún incidente que lamentar. Pero nada chica, que yo seguía sin poder cogerle el puñetero pellizco bien a la copa y notando el dichoso palito y claro, una que padece de dolor de cintura la pones 10 minutos haciendo el kamasutra en busca de la copa perdida, y se le quitan las ganas de ser ecologista y eficiente.
3. Tercera regla: no os voy a engañar estaba ya por los suelos, hasta que hizo Laura un directo y dijo que se podía cortar el palito de ève sin ningún problema, y así hice. Milagro! Dejé de notarla, casi me echo a llorar no sólo del dolor de cintura que tenía ese mes producido por la ciática, sino por avanzar con, en aquel momento, mi nueva amiga ève.
4. Cuarta regla: me había empeñado en ponerme y quitarme la copa de pie, con una pierna en alto como hacía con los tampones, y este último mes me dio por sentarme en el vidé, y así fue como descubrí cómo quitarla sin tener que rebuscar en mis adentros ni pinzarme el ciático. Porque cuando te levantas la copa se levanta contigo, y al sentarte se baja hasta salirse un poco, o un mucho, eso ya depende, y pillarle ahí el pellizco es de todo menos complicado.
Si me hubiese dado por sentarme antes, no me hubiese hecho falta esos 4 meses, pero los libra no destacamos por nuestra rapidez.
Sólo añadir para terminar que, si hay algún motivo que aun te impida probarla, que no sea que sientes asco de tocarte tus genitales, que estas vaginas que nos han dado son un regalo y no hay que hacer otra cosa con ellas que amarlas y tocarlas, tocarlas mucho!
En definitiva, si tuviese que ponerle alguna contra, sería el período de adaptación, que no todas están dispuestas a darle un margen de tiempo para ver si realmente es para ti o no la copa. Porque también puede pasar que no tengas la suerte de que este modelo de copa concreto sea para ti, de ser así, mínimo otra oportunidad a otro modelo yo sí se lo daría. Todo son puntos a favor, sin dudarlo ni un segundo.
Post no patrocinado.
Podéis comprarla aquí: https://www.ginesex.es/producto/copa-menstrual-eve-cup/
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