¿Eres nueva por el mundo
de las recetas “fit/saludables” dulces?
¿Te has animado a hacer
alguna y te ha sabido a cartón/arpiste?
¿No entiendes cómo “esas
recetas saludables” les puede saber rico a alguien?
Este post es para ti.
La ingesta durante años y
años de dulces cargados de azúcar nos atrofian el paladar, y no sabemos cuánto
de atrofiado lo tenemos hasta que nos llega la inspiración de querer mejorar
nuestra alimentación y, con toda nuestra ilusión nos aventuramos en nuestra
primera receta sin harinas, sin azúcar, con plátano como ingrediente principal
– en la foto se ve muy bien, pinta increíble y además es muy fácil de hacer-,
nos ponemos manos a la obra, llega la hora de hincharle el diente y… “¿Pero
qué? ¡¡Si está malo!! Quién rayos prefiere comerse esta MIE*** en lugar de un
donut?? Mira no, yo por ahí no paso”.
En el post de hoy os voy
a dar unos tips para que podáis llegar a comer todas esas recetas sin querer
haceros el harakiri por el camino y podáis disfrutar de ellas:
Ø Los cambios hay que hacerlos POCO A POCO,
progresivamente para ir acostumbrando a vuestro paladar a sabores nuevos sin
que note el cambio de un plumazo, hay que “engañarlo”.
Ø Empieza cambiando las harinas de tu despensa por harinas
integrales (integral de espelta por ejemplo), harina de almendra, de coco, de
avena (intenta que sean siempre integrales y sin gluten).
Ø Cambia el chocolate con leche por chocolate negro,
pero no te vayas a un % de cacao muy alto, empezar con un chocolate 50% cacao
sería suficiente para empezar a acostumbrar al paladar. Poco a poco ve subiendo
el % hasta llegar a mínimo el 70, un 85 o 90% está genial! ¿Cada cuánto subir el % de cacao? Cuando notes que te sabe rico es el momento de subir el porcentaje un poco más.
Ø No te olvides del cacao 0% desgrasado en polvo (no solo para postres, para batidos!).
Ø Si eras de las que hacía un bizcocho y, si la
receta ponía 100g de azúcar tú lo echabas a rajatabla, te recomiendo que el
siguiente le eches la mitad, en el siguiente un poquito menos y así
sucesivamente. En nuestra despensa como endulzante no puede faltar Stevia,
eritritol y dátiles. De ahora en adelante empieza bajando la dosis de azúcar a
la mitad y, poco a poco, ve echando edulcorante hasta que le cojas el punto que
a ti te sepa bien (aquí hay que hacer pruebas hasta dar con lo que a ti te
pueda parecer dulce). Cuando, por ejemplo, veas una receta que no lleva azúcar (endulzada sólo con plátano por ejemplo), échale sirope de dátil (dátil+agua) o edulcorante. Si es una receta muy grande (con muchos gr de ingredientes), divide las cantidades entre 2 para hacer la mitad, así podrás ir probando las cantidades de endulzante y, si no te queda rico, no habrás echo tanta cantidad!
Ø Añadir fruta a las recetas les añadirá dulzor sin
necesidad de añadir edulcorantes. Los edulcorantes (me da igual el que sea) no
son algo de lo que se deba abusar, si haces postres con base de fruta no te
hará falta usar tanto edulcorante. Además ,la fruta también da textura con lo
que hará falta menos harina. ¿Necesitáis algún motivo más para empezar a
consumir fruta?
Ø Intentad no tener en casa bollería/dulces
ultraprocesados. Hay recetas muy muy muy sencillas para matar un antojo puntual
sin tener que enfangar la cocina entera pero, si hay algo ya envasado
guardadito esperando a paliar ese antojo, siempre se va a preferir. OJO que no
quiero decir que jamás os podáis comer algún dulce industrial, pero tener
SIEMPRE en casa dulces industriales hará que a vuestro paladar le cueste más
trabajo desatrofiarse, date un tiempo sin ellos hasta que el chocolate 85% te
sepa rico, de ahí en adelante serás imparable!
Ø No te centres sólo en cuidar los dulces, cuida
también las harinas del resto de las comidas (pan, tortas, pasta, salsas…) el
azúcar está escondido en muchos productos y atrofian el paladar en muchos
platos que, no necesariamente, tienen por qué ser postres. Cuanto más producto
fresco consumas, más ricos te sabrán tus postres.
Ø No confundas saludable y casero con “no engorda”.
Que una receta tenga buenos ingredientes no quiere decir que se puedan comer
todos los días o que no vayan a repercutir en una pérdida de peso (si acaso es una pérdida de peso lo que estamos buscando). Habrá
personas que puedan consumirlos con más frecuencia y otras en menos. Tampoco es
lo mismo hacer un bizcocho y que te dure toda la semana e ir cogiendo un
pedacito al día, que hacer un bizcocho diario. CANTIDAD Y FRECUENCIA es la
cuestión.
Ø ¡Haced deporte! La mejor medicina para la
resistencia a la insulina y los antojos es el deporte. Cuando "quemamos" los
excesos de insulina que producimos no tenemos picos, sin picos no hay antojos y
¡sin antojos somos felices!
Ø Cuando vayas a un cumpleaños, a un restaurante, a
una fiesta, a cualquier evento y te pongan tarta, pastel o cualquier cosa, COME
SIN CULPA, DISFRUTA.
No te agobies si te haces
algún postre y no te sabe rico, o si echas de menos algo de azúcar y algún día
comes algún dulce industrial. Si esto lo tomamos como una obligación o como un
castigo no te valdrá para nada, tienes que aprender a disfrutar de
sabores/comidas nuevas desde el cariño y el amor a ti misma y a tu cuerpo. No
tengas prisa, tampoco tiene por qué gustarte todo lo que puedas ver que “parece
que tiene buena pinta y/o a todo el mundo le gusta”. Entra en la cocina,
experimenta, prueba y, sobretodo, disfruta.
Las recetas de las fotos las tenéis en destacados en Instagram en las carpetas "donuts" "tortitas plátano" y "muffins calabaza".
Post relacionados
https://yotambiensoysop.blogspot.com/2020/10/top-6-desayunosmeriendas-dulces-para-sop.html
https://yotambiensoysop.blogspot.com/2020/10/sobre-consumo-de-pan-cual-me-interesa.html
https://yotambiensoysop.blogspot.com/2020/09/procesados-si-procesados-no.html
https://yotambiensoysop.blogspot.com/2020/05/sindrome-pre-menstrual-antojos-y.html
https://yotambiensoysop.blogspot.com/2020/07/de-la-teoria-la-practica.html
https://yotambiensoysop.blogspot.com/2020/07/ejercicio-y-sop-manten-ralla-la.html
Comentarios
Publicar un comentario